Floración del olivar y comienzo de pinta del negocio
Parece que todo anduviera más rápido de lo que debería, todo excepto la normal fenología que nos tiene acostumbrado el olivo.
Hace más de un año y 2 semanas planteé la situación del negocio y de la fenología... justo cuando en la VI región estábamos en plena floración (flores abiertas intercambiando polen a no más dar), cuando la cantidad de ellas entregaba una suave neblina amarillezca y un espectáculo blanquecino mirando a lo lejos.
Hoy estamos atrasados, regulados por el irregular Efecto del Niño, cuyo cíclico devenir nos recuerda que nada es y nada será una constante. Cosas similares puedo contar de lo que vivimos en la producción pasada, donde la carga lograda batió records en los sectores y en la sumatoria de varios campos que conozco, en particular Los Lirios en Ovalle, cuyas casi 15 ton por hectárea aportaron buenos aceites, quizas algo más planos de los que acostumbramos, pero extra virgenes que se suman a los producidos en Pelequén que obligados por las condiciones ambientales nos entregan tonos verdes, frescos e intensos.
El negocio, según lo que se respira, por su parte tiene más que fluctuaciones, claras muestras de desarrollo. Ya comienza en el aire a dejarse ver compradores de graneles, aparición de marcas blancas y exportaciones de lampante. Ésto principalmente a necesidad, ya sea por los volúmenes que empiezan a guardarse y que no se pueden quedar mucho tiempo en los estanques, porque es más fácil venderlo o porque se fue juntando simplemente (caso de los lampantes). Quizas para ser más precisos hablo de los productores que poseen grandes superficies y tuvieron los primeros pasos de sus proyectos o "gateos" incluso que los obligaron a hacer las cosas de otra forma, no de la forma que hasta ayer se misionaba y visionaba el negocio del aceite de oliva extra virgen en Chile.
Por otro lado también se dejan oir los pequeños productores, que con mucho esfuerzo, pasión y deseos hacen lo que pueden para no sucumbir a la inclemencia de 30 o 40 marcas que dan vuelta por los anaqueles, tiendas especializadas o las mesas de retorantes, finos y no tan finos (s.nob).
Llegan lamentos de productores orgánicos, de productores de zonas con poca agua e incluso de los que se han encontrado con plagas no recordadas por los viejos ni enseñadas por nuestros profesores universitarios.
El negocio obliga en el mínimo dinamismo de los olivos a enfrentar condiciones dinámicas de un mercado que cada vez crece más, se hace más complejo y simple a la vez...
Conclusiones a priori, no podemos esperar que todo suceda, debemos adelantarnos, agruparnos en serio, la asociatividad técnica y la comercial, deben desarrollarse. Agradecemos a CREA de Argentina por transmitir su experiencia de asociatividad técnica, es una buena muestra de lo que podríamos hacer. Plataformas donde se pueda colocar el aceite como lo que es un comodity de alta gama que puede mejorar composiciones internacionales (Aceites Marroquíes, Españoles, Tunecinos) son una muy buena idea, trabajar como se trabaja con el trigo, el cobre, etc. Por otro lado no olvidar que tenemos un gran potencial de calidad, una imagen país reconocida y una costumbre a imitar lo bueno del mundo... las venta al detalle, son nuestra idea primaria y de continuar siendo nuestra base... el resto: soluciones a los problemas que causa producir tanto y no ser capaz de envasarlo cuando se requiere...
En Pelequén, 23 de Noviembre de 2009
Cuando aún espero que las nubes dejen que el sol salga a hacer su trabajo...
Hace más de un año y 2 semanas planteé la situación del negocio y de la fenología... justo cuando en la VI región estábamos en plena floración (flores abiertas intercambiando polen a no más dar), cuando la cantidad de ellas entregaba una suave neblina amarillezca y un espectáculo blanquecino mirando a lo lejos.
Hoy estamos atrasados, regulados por el irregular Efecto del Niño, cuyo cíclico devenir nos recuerda que nada es y nada será una constante. Cosas similares puedo contar de lo que vivimos en la producción pasada, donde la carga lograda batió records en los sectores y en la sumatoria de varios campos que conozco, en particular Los Lirios en Ovalle, cuyas casi 15 ton por hectárea aportaron buenos aceites, quizas algo más planos de los que acostumbramos, pero extra virgenes que se suman a los producidos en Pelequén que obligados por las condiciones ambientales nos entregan tonos verdes, frescos e intensos.
El negocio, según lo que se respira, por su parte tiene más que fluctuaciones, claras muestras de desarrollo. Ya comienza en el aire a dejarse ver compradores de graneles, aparición de marcas blancas y exportaciones de lampante. Ésto principalmente a necesidad, ya sea por los volúmenes que empiezan a guardarse y que no se pueden quedar mucho tiempo en los estanques, porque es más fácil venderlo o porque se fue juntando simplemente (caso de los lampantes). Quizas para ser más precisos hablo de los productores que poseen grandes superficies y tuvieron los primeros pasos de sus proyectos o "gateos" incluso que los obligaron a hacer las cosas de otra forma, no de la forma que hasta ayer se misionaba y visionaba el negocio del aceite de oliva extra virgen en Chile.
Por otro lado también se dejan oir los pequeños productores, que con mucho esfuerzo, pasión y deseos hacen lo que pueden para no sucumbir a la inclemencia de 30 o 40 marcas que dan vuelta por los anaqueles, tiendas especializadas o las mesas de retorantes, finos y no tan finos (s.nob).
Llegan lamentos de productores orgánicos, de productores de zonas con poca agua e incluso de los que se han encontrado con plagas no recordadas por los viejos ni enseñadas por nuestros profesores universitarios.
El negocio obliga en el mínimo dinamismo de los olivos a enfrentar condiciones dinámicas de un mercado que cada vez crece más, se hace más complejo y simple a la vez...
Conclusiones a priori, no podemos esperar que todo suceda, debemos adelantarnos, agruparnos en serio, la asociatividad técnica y la comercial, deben desarrollarse. Agradecemos a CREA de Argentina por transmitir su experiencia de asociatividad técnica, es una buena muestra de lo que podríamos hacer. Plataformas donde se pueda colocar el aceite como lo que es un comodity de alta gama que puede mejorar composiciones internacionales (Aceites Marroquíes, Españoles, Tunecinos) son una muy buena idea, trabajar como se trabaja con el trigo, el cobre, etc. Por otro lado no olvidar que tenemos un gran potencial de calidad, una imagen país reconocida y una costumbre a imitar lo bueno del mundo... las venta al detalle, son nuestra idea primaria y de continuar siendo nuestra base... el resto: soluciones a los problemas que causa producir tanto y no ser capaz de envasarlo cuando se requiere...
En Pelequén, 23 de Noviembre de 2009
Cuando aún espero que las nubes dejen que el sol salga a hacer su trabajo...
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abrazo
saludos!